En su taller de Quintanar de la Orden, Leopoldo Villaseñor trabajaba la hojalata con las técnicas que aprendió de su padre en 1958.
Su material de trabajo, la hojalata, es una delgada lámina de acero dulce recubierta de estaño a la que da forma que mediante… el uso de martillos y mazos sobre el yunque y de birgonias, tranchas, agujas, alicates, tijeras y limas.
Con extrema habilidad, cortaba, plegaba, moldeaba y soldaba las finísimas láminas de hojalata siempre siguiendo un proceso artesano en el que se conjugan la firmeza y la exactitud del gesto manual y que da como resultado todo tipo de objetos y recipientes entre los que podemos destacar las gárgolas y canalones y los faroles, además de cántaros para líquidos, faroles de procesión, cubos para trabajos agrícolas, etc.
Comenzó a trabajar la hojalata a la edad de 8 años en el taller de su padre, Modesto Villaseñor, que era también hojalatero.