C/ Ronda Creuer Balear, 11 1º- 07670 Portocolom, Mallorca
Tras trabajar durante años en varios talleres, en 1998, a los 30 años, Julio Servera abrió su propio taller. El motivo que le impulsó a trabajar en solitario no fue otro que el poder trabajar en lo que más le gustaba: la piedra. Desde siempre… lo ha hecho de forma artesanal, sin prácticamente maquinaria eléctrica, sólo una pequeña radial para cortar las piezas grandes.
Actualmente son múltiples los servicios y productos que Julio ofrece a sus clientes; desde la restauración y limpieza hasta la delicada elaboración de arcos y bóvedas, columnas, portales y ventanas, ornamentación para fachadas, terrazas y jardines, así como piezas más pequeñas como mesas, relojes, escudos heráldicos…
El objetivo de Julio es devolver la belleza de los tradicionales trabajos en piedra a las nuevas construcciones y decoraciones. Los principales materiales utilizados son la piedra caliza, el mármol y la arenisca.
Para la creación de nuevas piezas, Julio primero realiza bocetos sobre papel de cada una de las caras de la pieza. Seguidamente lo talla de forma cúbica y finalmente lo pule y redondea hasta conseguir la forma buscada.
En 2002, la Direcció General de Comerç del Govern Balear le otorgó la carta de Maestro Artesano de Picador de Piedra, poco después le concedieron la de Escultor y la de Maestro Grabador. En 2016 ha sido ganador del Premio Producto de Artesanía otorgado por el Consell de Mallorca.
Julio Servera Viedma se adentró en el mundo de la artesanía de forma casual, pues fue un capricho de su madre. Ella le pidió a un escultor en piedra que elaborara un mortero decorativo, muy típico en la cultura mallorquina. El escultor le dijo que,… si quería uno, que fuera su hijo y lo hiciera él. Y así fue. De esta anécdota hace ya 34 años.
El escultor que inició a Julio era conocido como Guillem “Xiscas” y tardó tan sólo medio año en explicarle cómo debía hacerlo, a partir de aquí Julio aprendió de forma autodidacta. Cinceles, punteros, gubias,… se convirtieron en extensiones de sus manos.
Cabe destacar los trabajos para el ayuntamiento de Porreres, pues se le encargó la reconstrucción de un pozo emblemático y del escudo heráldico de la ciudad, que puede verse en el parque municipal. También la restauración de varios edificios emblemáticos de la isla. Un edificio… destacable por la calidad y belleza del resultado es la Escribanía de Porreres, donde ha llevado a cabo una completa restauración de arcos, bóvedas y la reconstrucción de una pared exterior con una puerta y ventana.