Pº Marítimo, 19 – 18414 Pitres, La Taha
Alicatado Andalusí (Mosaico de piezas cerámicas poligonales)
Fátima Quesada se ha especializado en la reproducción de diseños geométricos con las cualidades cerámicas (mecánicas y estéticas) que encontramos en nuestro patrimonio histórico. Ha recuperado esta exquisita y laboriosa técnica decorativa cerámica desarrollando un producto que reaparece como… posible y viable en pleno s. XXI.
Estudia cada proyecto y cuenta con una técnica de “premontaje” que le permite adaptar y personalizar las decoraciones con mosaico geométrico (motivos, formatos, colores y tipos de piezas) en función de las exigencias (dimensiones, planos y volumen, estilismo y funcionalidad).
Utiliza una arcilla para uso constructivo de proveedores que garantizan la homogeneidad de la misma y fundamentalmente una buena calidad en cuanto a limpieza y composición.
Es una arcilla tradicional de baja temperatura (inferior a 1100 ºC), con una composición bastante calcárea y poco ferruginosa para garantizar que sus azulejos presenten:. buena resistencia mecánica a la flexión (242 Kg/cm2)
. buena adherencia a morteros y pegamentos (mayor porosidad de la terracota)
. baja deformación y alabeo (durante el proceso cerámico) por su menor plasticidad.
Para los vidriados utiliza los óxidos metálicos habituales en la cerámica medieval: caolín y silicatos de plomo para la composición del vidrio y también hierro, cobre, cobalto, manganeso y estaño como óxidos colorantes de los vidriados.
El proceso de elaboración:
– Conformación de planchas de arcilla, con el espesor apropiado, laminando la arcilla por medio de una extrusionadora de barro a la que acoplan diferentes “salidas de boquilla” expresamente fabricadas para las diferentes piezas planas o angulares.
– Corte manual de las diversas formas de azulejos. Este proceso se realiza gracias a las plantillas de acero cortadas con láser que Fátima diseña y una empresa especializada produce. El corte se realiza pieza a pieza manualmente por medio de espátulas, cuchillas y “cutters”, evitando otros sistemas más modernos (troqueles o moldes) porque su corte es biselado, como en los antiguos alicatados, para que cada azulejo pueda quedar embutido en el mortero formando un bloque con el muro.
Se aprovecha el calor de los hornos para asegurar el completo secado de las piezas antes de proceder al “bizcochado” o primera cocción.
– Para el bizcochado también se colocan las piezas en rejilla dentro el horno dejando diversos canales o “pasillos de tiro” para asegurar un buen fluido de los gases calientes y que toda la carga resulte homogéneamente cocida. La cocción del “bizcocho” se realiza a 1050 ºC para garantizar que los azulejos presenten la dureza máxima dentro de su género (considerado Baja Temperatura en cerámica). Esta cocción dura entre 7 y 8 horas.
Los hornos son de combustión para obtener la calidad y la tonalidad de los vidriados que caracteriza al trabajo de Alizares (puesto que los óxidos de los esmaltes resultan afectados por el carbono de los gases de combustión). Utilizan pirometría digital, materiales aislantes y refractarios modernos, así como programadores de cocción en todo lo posible.
– Una vez bizcochadas las piezas se esmaltan manualmente por el sistema de “bañado superficial”. Ningún medio mecanizado industrial resulta válido para esta parte del proceso debido a peculiaridad de las formas que fabrican. Para enhornar las piezas se colocan en “gacetas” industriales reinventados para adaptarlos a sus diferentes y pequeños azulejos.
Sus colores son vidriados de formulación propia para conseguir la paleta árabe-medieval que identifica su carta de colores, conseguida después de los sucesivos cálculos y ensayos. Además, emplea los minerales y óxidos originales que producían las antiguas coloraciones árabes, huyendo de la falsificación que supondría la suplantación de éstos por las materias primas más baratas que se utilizan en las producciones modernas.
– La cocción del vidriado se realiza también en 7 horas y a 1000 ºC. Sus fases y las condiciones de oxidación – reducción en la atmósfera del horno tienen que estar extremadamente controladas y serán definitivas para obtener la calidad tan particular de sus colores.
– Diseño y premontajes:
En realidad la primera fase del trabajo empieza por el diseño, no sólo elaborando un proyecto personalizado, sino porque con él será posible confeccionar las hojas de cálculo que indicarán el trabajo de las distintas áreas del taller (qué tipo de piezas, las cantidades, los colores y cómo se prepararán para el pedido).
Todos los modelos se comercializan pre-montados generalmente en “módulos de colocación” (grupos de piezas adheridas a un film) que son acoplables unos con otros y recubrirán una superficie específica, sin necesidad de cortes ni replanteos en obra. Aportan estos planos y un “mapa de módulos” que indica la numeración y posición de los módulos en el alicatado.
Gracias a la Escuela de Artes y Oficios de Granada que, en un pequeño Curso monográfico descubrió la cerámica (en su totalidad).
La Escuela de Artes Villalar de Madrid le mostró el mundo del diseño, y la cerámica como parte del arte del s. XX. En… la Escuela Oficial de Cerámica de Madrid obtuvo la Titulación de Graduado en Cerámica y disfrutó de talleres, herramientas y algunos conocimientos necesarios.
Pero sin duda, las huellas de los maestros que han marcado su profesión pertenecen a La Alpujarra:
– D. Antonio Orellana, el último alfarero (genuino) de La Alpujarra (Órgiva), le enseñó a comprender “el barro”, a saber tratarlo con manos alfareras y sobre todo a descubrir el oficio.
– Con José Vera Palomino, Dr. en Química que cambió su trabajo de la Junta de Energía atómica en Moncloa por una vida de ceramista en Órgiva, construyó sus primeros hornos, experimentó con los materiales cerámicos del terreno y conoció esas moléculas y silicatos imprescindibles para la química cerámica. Trabajó como su ayudante, para la formulación y preparación de los múltiples ensayos, en los cursos que impartió sobre vidriados cerámicos.
– Imprescindibles fueron también dos consagrados ceramistas extranjeros que llevaron a La Alpujarra técnicas y conocimientos de las mejores escuelas: Jonathan Trust (norteamericano de la Escuela Bernard Leach de Inglaterra) y Akio Ukon (ceramista japonés que nos acercó a la creación en porcelana y al arte del pincel en la decoración).
– La figura fundamental y más preciada, la que determinó la especialización de su trabajo es su vecino, maestro y amigo Donald Gray: arquitecto y diseñador de origen australiano, pionero en el estudio y la realización de arquitectura árabe-andaluza en la segunda mitad del siglo XX. Donald fue director en las dos Escuelas Taller en las que trabajaron juntos durante 6-7 años (Lebrija, Sevilla y Fondón de Andarax, Almería) y le introdujo en el diseño y la geometría árabe – andaluza, mostrándole la importancia de la Ciencia de las Proporciones en el Arte y su aplicación en los proyectos actuales.
Profesora de Cerámica en el Taller Escuela de Restauración de Lebrija (Sevilla): Imparte enseñanza teórica y práctica en todas las técnicas de conformación manual de piezas; decoraciones en cerámica e investigación de motivos tradicionales; diseño y construcción de hornos de cerámica y cochuras con gas… y leña; construcción de instalaciones para la preparación de arcillas partiendo de tierras locales.
Contratada, también por el Ayuntamiento de Lebrija, imparte un curso de 100 horas sobre técnicas y química cerámica, para la Cooperativa Cerámica Lebrijana, a la que asesora para la resolución de problemas de fabricación.
Profesora de Cerámica en el Taller Escuela de Restauración de Fóndón, Almería. Los alumnos construyen su propio horno de 1 m3 (para leña), llegando a una producción diaria de azulejos, vajillería, ladrillo manual y placas para denominación de calles, utilizadas en la construcción del “pueblo artesanal” y decoraciones municipales. Imparte las asignaturas teóricas de Química cerámica, Historia de la cerámica, Dibujo técnico y Diseño geométrico.
Trabaja para F.I.S.A. (Fundación Internacional de Síntesis Arquitectónica), impartiendo un curso en Saint Louis, Senegal, y organizando la creación de una cooperativa local para fabricación cerámica.
Publicación del artículo: “nuevas tecnologías aplicadas a la producción artesanal” en la “Guía de las nuevas tecnologías para artesanos” editado por FUNDESARTE.
Programas de Colaboración al Desarrollo para el Sector Artesanal en el Norte de Marruecos: Intervenciones entre los años 2008 a 2012 en la cooperativa cerámica de mujeres de Indardouchen (Al-Hoceima) para asesoramiento técnico y desarrollo de nuevos prototipos en cerámica bereber.
Imparte curso de 40 horas en CEARCAL (Centro de Artesanía de Castilla León): “Introducción al Diseño Geométrico y a la realización del alicatado tradicional granadino”
Ponencia en el Seminario “Mujer y Empresa en el Mundo Rural de Andalucía y Marruecos”, Fundación Tres Culturas (Sevilla): “Posición, valores y buenas prácticas de las empresas artesanas en el S XXI”.
Nombrada “Maestra artesana” por la Consejería de Turismo, Comercio y Deporte de la Junta de Andalucía.
Presentación de su trabajo en el Seminario Internacional de Arquitectura y Oficios Tradicionales de la Construcción (Universidad Politécnica de Madrid) celebrado con motivo de la concesión del “Premio Rafael Manzano 2016”
– Zócalos en la piscina del Hotel Meliá Sierra Nevada.
– Aseos en el domicilio de D. Francisco Romero (torero) en Elviria (Mälaga).
– Rehabilitación del edificio de El Suizo” (Granada)
– Cenefas para el Hospital de El Ejido (Almería) (200 m.l.)
– Restaurante VIP en el Parque Temático… de “Terra Mítica” (Alicante)
– Alicatados para la Casa Club de Sotogrande (Cádiz), 900 metros cuadrados.
– Alberca para la decoradora Ann Ward en Burgos, 30 m2.
– Arcos de acceso y fuente en “Alhambra del Golf” (Guadalmina, Málaga), 50 m2
– Rehabilitación del restaurante “La Cabaña” (Sotogrande)
– Pabellón Morisco, aseos, cocina y despensa para la familia Olsen en Noruega
– Hammam Al-Andalus en Málaga
– Rehabilitación de vivienda en el Sacromonte para el guitarrista José Romero (ver Wikipedia).